No dejaré que me abandone, si puedo irme antes
No dejaré que me rompa el corazón si puedo arrancármelo antes
No dejaré que me compadezcan si ya estoy sintiendo pena por ellos
Y no habrá despedidas para aquellos que bailaron en mis fiestas
me iré y caminaré sabiendo que me recompondré
que todo esto no me importará
que hace tiempo ya que dejó de molestarme
y cuando cruce la puerta cuestionaré mi poder para marcharme y pensaré si el no llorar por quienes bailaron en mi cuerpo es un reproche o un consuelo
y querré girar la cabeza
para entonces no quedará nadie
A veces cruzamos puertas cuando realmente lo que queremos es girar la cabeza.
ResponderEliminarhay veces que es mejor adelantarse...
ResponderEliminarquizás lo bueno es que ahora habrá otros corazones, otras fiestas, otras historias en las que bailar...es el momento de dejarlo todo atrás, para comenzar mirando hacia adelante...
y el pasado, quieras o no, aunque no quede nadie...sí quedará en ti...
Una vez quise irme, pero en ese momento creía que lo mejor era quedarme. Me quedé. Me dejaron.
ResponderEliminarDespués pensé "¡Qué tonta fuiste! haberte marchado tú antes" Pero tengo la extraña costumbre de quedarme hasta el final. Hasta que alguien me dice eso de fin, y acabo volviendo sola a casa.
A mi me gusta quedarme la última, cerrar bien la puerta y tirar la llave.
ResponderEliminarEres un amor, zahara.
Punzadita...directa!!
ResponderEliminarDéjate y luego me lo cuentas...
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