entonces se acercaba a la maleta sucia y vieja de la entrada, le quitaba el polvo con la mano y la abría.
sacaba una a una las enormes y largas púas y las iba colocando en sus orificios.
se puso de pie y caminó por la casa comprobando su resistencia a la gravedad.
había hecho un gran trabajo
ahora era la mujer erizo.
Me-encanta.
ResponderEliminar¡Qué bonito!
ResponderEliminar¿De qué o quién te quieres proteger? mmm...
ResponderEliminarqué suerte, así no se le acercan indeseables..;)
ResponderEliminar¡Me encanta la mujer erizo, yo también quiero tener esa experiencia!
ResponderEliminar(terrones de azúcar para
que tengas dulces sueños)
supongo...
ResponderEliminarVaya... mejor que la muejer armadillo!
ResponderEliminarpinchona.
ResponderEliminarEstremecedor, me gusta!!!!
ResponderEliminarDebo ser el único al que una mujer-erizo le asusta tanto como la oscuridad que da la luna nueva.
ResponderEliminarPrecioso... tu música me inspira mucho para ilustrar!
ResponderEliminarSaludos!!!
¡valientes los que se atrevan a abrazarla!
ResponderEliminarASOO, NO SERÁ QUE ES MASOQUISTA?
ResponderEliminarCreo que yo tambien me convertiré en una mujer erizo... así no me harán más daño. Buena idea !
ResponderEliminarMujer erizo busca manos de algodón.
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